Tan sólo 800.000 euros, calderilla vamos.
Es la cifra por la que se contrató durante años a Special Events, una de las empresas corruptas relacionadas con la trama Gürtel, durante el tiempo en que Rita Barberá, la reina de las anchoas, bolsos de Vuitton y faraona de la capital del Turia, presidía la FEMP (Federación de Municipios y Provincias) y por lo cual se está llevando a cabo una investigación judicial. ¡Qué sorpresa oiga!
La noticia nos ha devuelto a la realidad del día a día que vive la política española, donde algunos vociferan como posesos y posesas, cuales profetas del Apocalipsis, y acusan violentamente sin pruebas mientras la policía y los jueces (y juezas) actúan sin reservas en cuanto suenan las alarmas de la corrupción.
Porque cabe recordar que ha sido un juez del TSJM quien ha ordenado la investigación esta vez. No ha sido ni el Gobierno, ni el PSOE ni el Papa de Roma, NO, ha sido un juez, como tantos otros jueces, incluso de corte conservador, quienes han puesto en tela de juicio la credibilidad de los populares.
El Partido Popular está al borde del colapso, llegando a ser propios militantes quienes denuncian las irregularidades y los negocios sucios. Algo huele mal en el PP, está empezando a pudrirse, y la peste es insoportable. Está contaminando la moral política de este país, y nos abochorna e indigna como ciudadanos y ciudadanas de a pie, los cuales tenemos derecho a una clase política en condiciones, limpia y honrada.
Es la cifra por la que se contrató durante años a Special Events, una de las empresas corruptas relacionadas con la trama Gürtel, durante el tiempo en que Rita Barberá, la reina de las anchoas, bolsos de Vuitton y faraona de la capital del Turia, presidía la FEMP (Federación de Municipios y Provincias) y por lo cual se está llevando a cabo una investigación judicial. ¡Qué sorpresa oiga!
La noticia nos ha devuelto a la realidad del día a día que vive la política española, donde algunos vociferan como posesos y posesas, cuales profetas del Apocalipsis, y acusan violentamente sin pruebas mientras la policía y los jueces (y juezas) actúan sin reservas en cuanto suenan las alarmas de la corrupción.
Porque cabe recordar que ha sido un juez del TSJM quien ha ordenado la investigación esta vez. No ha sido ni el Gobierno, ni el PSOE ni el Papa de Roma, NO, ha sido un juez, como tantos otros jueces, incluso de corte conservador, quienes han puesto en tela de juicio la credibilidad de los populares.
El Partido Popular está al borde del colapso, llegando a ser propios militantes quienes denuncian las irregularidades y los negocios sucios. Algo huele mal en el PP, está empezando a pudrirse, y la peste es insoportable. Está contaminando la moral política de este país, y nos abochorna e indigna como ciudadanos y ciudadanas de a pie, los cuales tenemos derecho a una clase política en condiciones, limpia y honrada.
Basta ya de sonrisas cínicas y escusas mediocres, altaneras y miserables. La gente tiene derecho a que les den una explicación, ya no solo como obligación de todo gobernante y dirigente político de responder ante el pueblo, sino ya por decencia y decoro personal, moral y respeto institucional.
2 comentarios:
¡Muy bien Carlos!
Te ha faltado añadir: rita, la reina del pelo cardado (y a la foto me remito).
El pp hecha una hedor insoportable desde hace tiempo.En muchos partidos hay que tirar un poco de ambientador, pero este tiene el síndrome de diógenes y tendría que ser destruido y reformado.
Karmenxu
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